Uno de los
rituales de purificación mas antiguos que encontramos en la historia de cuidado
del cuerpo.
El Jabón
negro también llamado Jabón Negro Beldi hecho a base de pasta de aceitunas negras
sin conservantes ni perfumes 100% natural utilizado para una exfoliación
profunda junto con el Guante Kessa dejando la piel preparada para una
hidratación adecuada al dejar nuestra piel libre de impurezas y células
muertas.
El
resultado es sorprendente, y después del invierno es un momento ideal para que
nuestra piel respire y se renueve.
Para hacer bien este ritual, necesitamos crear una
temperatura caliente y húmeda parecida a la del Hammam con vapor de agua. Para ello, hay que
dejar funcionar un calefactor un rato y al mismo tiempo abrir el grifo del agua
caliente para calentar el baño y crear un poco de vapor.
Una vez esta listo el baño, nos duchamos con agua más
caliente de lo habitual. Como ejemplo podemos ir lavándonos el pelo para darle
tiempo al cuerpo a calentarse más.
Después aplicamos el Sabón Belde sobre una la piel caliente y
mojada y lo dejamos actuar unos 10-20 minutos, en ese tiempo podemos exfoliar los
pies con la piedra Pómez eliminando las durezas y callos o también hacer una
exfoliación facial con azúcar y aceite de oliva.
Transcurrido ese tiempo, nos enjuagamos bien para eliminar
restos del Belde y acto seguido comenzamos con la exfoliación frotando la piel
de forma circular con el GUANTE KESSA, quitando de esa forma las células muertas y
estimulando la piel favoreciendo la circulación de la sangre.
Para saber que hemos aplicado bien el proceso, nos tiene que
salir la piel muerta en forma de tiras finas.
Consejo: No es aconsejable usar el guante en la cara.
GUANTE KESSA
JABÓN BELDI
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